
El Círculo Ecuestre celebró el pasado 27 de noviembre un nuevo episodio del ciclo de coloquios Barcelona a través de sus escritores con Javier Cercas como protagonista.
Tras la presentación del presidente del Círculo Ecuestre, Enrique Lacalle, el novelista, académico y recién nombrado miembro de la Real Academia Española (RAE), entabló un diálogo con Xavier Ayén, redactor jefe de Cultura en La Vanguardia.
La charla, que brindó una inmersión en el pensamiento y obra de uno de los autores más destacados de las letras contemporáneas, sirvió para desmontar mitos sobre la figura del escritor, quien reflexionó sobre el papel del autor en la sociedad y su conexión con los lectores.
"Un escritor puede ser cualquier cosa menos un idiota", espetó Cercas durante su entrevista para después aclarar que los escritores, además de crear, tienen la responsabilidad de comprometerse con su tiempo. Sobre el popular ego de la profesión, el escritor argumentó que los grandes autores desaparecen en sus obras, permitiendo que el lector sea el verdadero protagonista. "El ego es lo peor que puede tener un escritor”, aclaró Cercas, para después destacar la importancia de la interpretación lectora, afirmando que “las obras maestras no las hacen los escritores, las hacen los lectores atentos y pacientes”.
Preguntado por su reciente nombramiento como miembro de la Real Academia Española (RAE), Javier Cercas compartió con el público lo siguiente: "Nunca tuve la pretensión de ser académico. El director de la Academia me llamó y, aunque me resistí al principio, terminó convenciéndome”. Además, describió la institución como una mezcla entre tradición y modernidad: “La RAE es parte de la mejor tradición de este país. Todos los premios Nobel han estado ahí, Asimismo, tiene protocolos y tradiciones muy fijas. Debe renovarse”. “Yo, por ejemplo, leí un discurso que era un manifiesto, que no hay nada menos académico”, apuntó.
En el marco del diálogo celebrado en el Círculo Ecuestre, Cercas explicó algunos detalles sobre su última obra, El loco de Dios en Mongolia, fruto de una experiencia única acompañando al Papa Francisco en un viaje a Mongolia: "Es un libro sobre el legado cristiano en un mundo cada vez más laico. ¿Qué hacemos con nuestra herencia cristiana? Esta es la pregunta que guía el relato". El autor describió la obra como "una mezcla de géneros: ensayo, biografía, autobiografía y crónica, pero sobre todo un thriller cuyo enigma central es el mayor de todos: Dios y la vida eterna".
El coloquio también estuvo lleno de humor y anécdotas personales entre las cuales el escritor barcelonés dijo lo siguiente: "Me imagino a Cervantes como el hombre más humilde del mundo. Los mejores escritores que he conocido son los más modestos".
Respecto a su posicionamiento social, Cercas aseguró que jamás ha podido esconder su pensamiento: "No sé no hacerlo. En los momentos más duros en Cataluña, aunque sabía que podía traerme problemas, no podía callarme”. Siguiendo por el tema político, habló sobre su encuentro con Macron, del que dijo lo siguiente: "Es increíble cómo los políticos franceses leen. Cuando Macron me pidió conversar sobre mis libros, fue un honor y una muestra del prestigio que la cultura tiene en Francia".
Cercas cerró la charla con una reflexión sobre la literatura y su lugar en el mundo: "La auténtica inmortalidad de la literatura es el anonimato. Lo que importa no es quién escribió las grandes frases, sino que ahora son parte de todos nosotros."
El evento reafirmó el compromiso del Círculo Ecuestre con la difusión de la cultura y el fomento del debate intelectual, siendo una cita imprescindible para los amantes de la literatura.